- Oriente Medio enfrenta una de las mayores crisis hídricas del mundo, con recursos extremadamente limitados, altas tasas de pérdidas de agua en las redes de distribución, y una creciente demanda debido al rápido crecimiento urbano y agrícola. En este contexto, las tecnologías innovadoras y la gestión eficiente del agua son clave para garantizar la sostenibilidad de los recursos en la región.
Desde su incorporación a Aganova como Middle East Regional Manager, Alia López ha asumido el desafío de liderar la expansión de la compañía en una región clave para la gestión sostenible del agua. Con una sólida experiencia internacional y una trayectoria destacada en el sector hídrico, Alia trabaja desde la oficina de Aganova en Dubái, llevando las innovadoras soluciones tecnológicas de la empresa a mercados que enfrentan retos críticos en la gestión de recursos hídricos. Hoy conversamos con ella para conocer más sobre su visión, sus experiencias en Aganova y cómo está contribuyendo a la misión de reducir las pérdidas de agua en una de las regiones más áridas del mundo.
Desde tu experiencia, ¿cuáles son los principales desafíos técnicos para detectar fugas en las redes de transporte de agua en Oriente Medio?
R: Los principales desafíos técnicos incluyen una enorme extensión de redes de transmisión, infraestructuras envejecidas y la propia complejidad de las redes, que hacen necesario el uso de tecnologías avanzadas de detección de fugas. Además, los altos niveles de ruido ambiental procedentes de estaciones de bombeo, infraestructuras urbanas y obras civiles pueden dificultar la detección de fugas pequeñas.
En términos de precisión, ¿cómo se asegura que las tecnologías de Aganova puedan identificar fugas pequeñas antes de que se conviertan en un problema mayor?
R: El sistema Nautilus de Aganova utiliza un dispositivo acústico de alta resolución que viaja dentro de la tubería, detectando incluso las anomalías más pequeñas con una precisión excepcional. A diferencia de los sensores externos, que pueden verse afectados por el ruido ambiente y las condiciones del suelo, nuestra tecnología en línea permite localizar fugas de manera directa y muy precisa, lo que ayuda a los operadores a abordar los problemas antes de que se conviertan en fallos críticos.
¿Cuáles son los materiales o configuraciones de tuberías más difíciles de inspeccionar y cómo se adapta la tecnología de Aganova a estos casos?
R: Las tuberías de gran diámetro y los materiales no metálicos, como el HDPE, presentan mayores desafíos debido a sus propiedades acústicas. Sin embargo, nuestra tecnología Nautilus está diseñada para adaptarse a estas variaciones, gracias a su alta sensibilidad y capacidad para recorrer geometrías complejas en las tuberías, lo que garantiza una detección precisa de fugas en distintos materiales.
¿Qué impacto tienen las condiciones climáticas extremas en Oriente Medio sobre las redes de agua y la detección de fugas?
R: Las temperaturas extremas aceleran la degradación de las tuberías, aumentando el riesgo de fugas y roturas, especialmente en infraestructuras envejecidas. La expansión y contracción térmica también genera un estrés adicional en las uniones. Además, las altas temperaturas dificultan el trabajo de campo de nuestros especialistas, lo que supone un desafío adicional para las inspecciones en la región.
¿Qué características específicas de las redes de transporte de agua en Oriente Medio hacen que la gestión y el monitoreo sean más complejos?
R: Las redes de transmisión de agua en la región suelen cubrir grandes distancias a través de paisajes áridos y remotos. Además, la dependencia del agua desalada incrementa los costes operativos, lo que hace aún más necesario implementar estrategias eficaces de prevención de pérdidas.
En términos de diseño, ¿qué elementos se deben considerar para minimizar las pérdidas en redes de transporte a gran escala?
R: Aunque en la región ya se aplican altos estándares en el diseño y ejecución de tuberías, considero que es aún más importante la operación y el mantenimiento. Esto incluye una gestión adecuada de la presión, la monitorización en tiempo real a través de sensores y un enfoque integral en la gestión de activos hídricos. La implementación de estrategias de mantenimiento predictivo permite reducir las pérdidas de agua y extender la vida útil de la infraestructura.
¿Cómo influye la antigüedad de las infraestructuras en las tasas de pérdida de agua y qué soluciones técnicas pueden implementarse para modernizarlas?
R: Las infraestructuras envejecidas provocan un aumento en la tasa de fugas y en los costes de mantenimiento. Para abordar este problema, las empresas de agua deben adoptar estrategias de gestión de activos más proactivas, que incluyan la detección sistemática de fugas en línea, tecnologías de evaluación del estado de las tuberías y planes de rehabilitación o sustitución específicos. Las soluciones de Aganova permiten a las compañías identificar puntos críticos y priorizar intervenciones de manera más eficiente.
Aganova ya ha implementado proyectos en países clave como Qatar o Emiratos Árabes Unidos. ¿Podrías contarnos más sobre estos casos de éxito y cómo han contribuido a reducir las pérdidas de agua o mejorar la eficiencia de las redes de transporte?
R: En Catar, Aganova colaboró con una importante empresa de servicios públicos para inspeccionar líneas de transmisión críticas, logrando identificar y cuantificar fugas que habían pasado desapercibidas durante años. En Emiratos Árabes Unidos, desplegamos Nautilus en secciones estratégicas de la red, lo que permitió realizar reparaciones específicas y reducir significativamente el agua no contabilizada. Estos proyectos han demostrado el valor de la detección avanzada de fugas para optimizar el rendimiento de las redes y mejorar la sostenibilidad del recurso.
¿Qué barreras técnicas o culturales se enfrentan en los proyectos de detección de fugas en la región y cómo se superan?
R: No existen barreras culturales en lo que respecta a la conservación del agua en la región. Países como Emiratos Árabes Unidos, Qatar, Arabia Saudita y Omán son altamente proactivos en la búsqueda de soluciones para la eficiencia hídrica, y los contratos de agua inteligente más grandes que he gestionado han sido en esta región. Otras partes del mundo podrían inspirarse en los gestores, regulaciones, políticas e inversiones en eficiencia hídrica de Oriente Medio, ya que tanto las empresas de agua como los gobiernos están comprometidos con la sostenibilidad y la gestión a largo plazo de los recursos.
Oriente Medio, una de las regiones más áridas del planeta, concentra el 5% de la población mundial pero solo cuenta con menos del 1% de los recursos hídricos renovables globales. Con tasas de pérdidas de agua que en algunos países superan el 40% y una creciente demanda por el rápido desarrollo urbano y agrícola, la implementación de tecnologías avanzadas como las de Aganova es crucial. Estas soluciones no solo permiten reducir pérdidas y optimizar las redes de transporte de agua, sino que también son un paso esencial hacia la sostenibilidad hídrica en una región donde cada gota cuenta.